AeroPress
La AeroPress llegó para romper esquemas: un dispositivo moderno, compacto y versátil que demuestra que preparar un café excelente no es exclusivo de grandes máquinas. Piensa en esas tardes de aventura donde llevas tu AeroPress en la mochila, o en la oficina cuando necesitas un respiro de calidad. Con este pequeño cilindro de plástico, puedes obtener una taza sorprendentemente rica y aromática en apenas un par de minutos. Es el método perfecto para resaltar la dulzura y suavidad de los granos colombianos en cualquier lugar. La experiencia es sencilla y divertida: mezclar, presionar y de pronto tienes en tus manos un café intenso como un espresso ligero o suave como un filtrado, según cómo lo prepares. AeroPress te invita a experimentar sin complicaciones, acercándote al café colombiano de una forma práctica y acogedora.
Qué necesitas
- AeroPress (cámara, émbolo y tapa con filtro).
- Filtros de papel para AeroPress (vienen con el equipo). También existen filtros de metal reutilizables opcionales.
- Café colombiano de especialidad, molido medio o medio-fino. Cantidad: unos 15–18 g (1 cucharada colmada) para una taza, ajustable al gusto.
- Agua caliente, idealmente entre 80°C y 85°C (un poco menos caliente que la de hervir tradicional, para una extracción más dulce). Si no tienes termómetro, hierve el agua y déjala reposar unos 2 minutos antes de usarla.
- Cuchara o agitador (a menudo la AeroPress trae uno de plástico) para revolver.
- Taza o jarra resistente al calor, sobre la cual presionarás la AeroPress.
- Balanza (opcional): para medir café y agua, útil si quieres repetir la receta exacta cada vez.
- Molinillo (opcional): si tienes granos enteros, muélelos justo antes de la preparación para mayor frescura. La AeroPress funciona bien con un molido un poco más fino que el de la prensa francesa, parecido a la arena fina.
Preparación paso a paso
- Prepara el filtro y el equipo: Coloca un filtro de papel en la tapa de plástico de la AeroPress. Enjuaga el filtro con un chorrito de agua caliente para eliminar sabor a papel y calentar un poco la tapa (esto también ayuda a que se adhiera mejor). Arma la AeroPress en posición tradicional: es decir, con la cámara apoyada directamente sobre tu taza o jarra, y la tapa con el filtro asegurada en la parte inferior. (Si prefieres el método invertido, puedes hacerlo, pero aquí mantendremos la forma estándar por simplicidad).
- Añade el café molido: Vierte los 15–18 gramos de café molido en la cámara de la AeroPress. Sacude ligeramente la cámara para nivelar el lecho de café. El aroma del café molido fresco te dará un adelanto de la taza que viene en camino.
- Agrega el agua (pre-infusión): Comienza vertiendo agua caliente (80-85°C) hasta humedecer todo el café, más o menos hasta la marca número 2 de la cámara (si usaste ~17 g de café, esto serán unos 50-60 ml de agua, aproximadamente). Remueve suavemente el café con la cuchara por unos segundos para asegurarte de que todas las partículas estén mojadas. Deja que el café repose unos 30 segundos, permitiendo que libere sus primeros aromas y comience a extraerse lentamente.
- Completa con agua y remueve: Pasados los 30 segundos, añade más agua caliente hasta cerca de la marca 4 de la AeroPress (o hasta llenar la cámara dejando un centímetro libre del borde, si no tienes marcas visibles). En total deberás agregar unos 200 ml de agua para una taza grande. Remueve nuevamente de forma suave durante 10 segundos. Notarás que se forma una ligera espuma color canela en la superficie, señal de una buena extracción en proceso.
- Coloca el émbolo: Inserta el émbolo de la AeroPress en la parte superior de la cámara, apenas unos centímetros, creando un sello al vacío. Esto evita que el café gotee prematuramente. Deja el émbolo ahí, sin presionar aún, y espera unos 30 segundos más. En total, el café habrá estado infusionando alrededor de 1 minuto.
- Presiona y extrae el café: Ahora viene la parte divertida. Sostén con una mano la taza o jarra (para que no se vuelque) y con la otra comienza a presionar el émbolo hacia abajo de forma constante. Aplica una presión suave y continua, tomándote unos 20-30 segundos en llegar hasta el fondo. Deberías escuchar un leve silbido de aire al final, señal de que has extraído todo el líquido. ¡Ya casi está lista tu taza!
- Sirve (si es necesario) y disfruta: Si usaste una jarra para preparar, vierte el café en tu taza. Si preparaste directamente en la taza, ya lo tienes servido. La AeroPress produce un concentrado de café algo más intenso que un filtrado normal. Puedes diluirlo con un poco más de agua caliente si lo deseas estilo “americano”, o disfrutarlo tal cual para un sabor más potente. Ahora solo queda deleitarte: prueba ese primer trago y siente cómo un buen café colombiano puede ser tan vibrante y aterciopelado incluso en un método tan rápido.
Consejos adicionales
- Experimenta con el tiempo y la temperatura: La AeroPress es muy versátil. Si buscas un sabor más intenso tipo espresso corto, puedes probar con tiempos de infusión más cortos (30-45 segundos en total) y presionar inmediatamente; para un perfil más cercano a un filtro tradicional, el minuto recomendado funciona bien. Jugar con la temperatura del agua también influye: una temperatura más baja (75-80°C) puede resaltar la acidez brillante de algunos cafés colombianos, mientras que una más alta (90°C) extraerá más cuerpo y amargor.
- Prueba el método invertido: Una vez domines la técnica básica, atrévete con la AeroPress invertida. En este método montas la AeroPress al revés (émbolo abajo, abierto hacia arriba), añades café y agua, lo dejas infusionar y luego colocas el filtro y volteas la AeroPress sobre la taza para presionar. Muchos aficionados encuentran que así controlan mejor la extracción y obtienen una taza aún más dulce.
- Limpieza inmediata: Una gran ventaja de la AeroPress es lo fácil que se limpia. Apenas termines de preparar, desenrosca la tapa y empuja el disco de café usado (el “puck”) directamente a la basura. Enjuaga las piezas con agua caliente. Mantenerla limpia evita acumulación de residuos que puedan alterar el sabor en futuras preparaciones.
- Viaja con tu AeroPress: Si eres aventurero, la AeroPress es tu mejor aliada. Su tamaño portátil y su resistencia la hacen ideal para llevar de viaje, de campamento o a la oficina. Solo necesitas café molido y agua caliente para disfrutar un café colombiano de calidad en cualquier lugar. Lleva también algunos filtros en una bolsita ¡y listo!
- Leche y AeroPress: Si te gusta el café con leche, la AeroPress produce un concentrado perfecto para ello. Puedes preparar la dosis de café y luego añadir agua y leche caliente al gusto, obteniendo una especie de americano latte muy suave. Las notas de nuez y chocolate típicas de ciertos cafés colombianos brillarán en combinación con la leche.